FKK (Freikörperkulture) o “La cultura del cuerpo libre” es el hábito de andar por la vida, enseñando en todo su esplendor los atributos físicos. Cuando llegué a vivir a Berlin, yo ya traía de serie mi espíritu libre, mi mente abierta y un pasado un tanto hippy, que había chupado mucho nudismo en las playas de Almería. Vamos, que no me sorprendía nada de esto, y mucho menos escandalizarme. Fue una sorpresa grata encontrar parques, lagos y espacios, a diestro y siniestro,, donde la gente no tiene ni la vergüenza ni la tontería de mostrar su desnudez y sus cuerpos perfectamente imperfectos. Desde que llegué a Berlín no he dejado de ver gente con el cuerpo al aire libre en cualquier parte, tranquilos, sin miradas reprobatorias alrededor, sin darle la importancia mediocre que se le dá al cuerpo en otras culturas y ámbitos….normalmente en países católicos y/o en ambientes conservadores. Por suerte para muchos de nosotros, Berlín ni es católico, ni es conservador. Ya se sabe hace tiempo que Berlín es «pobre, pero sexy«.
Pero si hasta Angela Merkel, líder de la Unión Demócrata Cristiana ( sí, cristiana), ya paseaba sus encantos al aire con sus amiguis. ¡Como para escandalizarse en este país!
Angela Merkel de joven ( primera a la izquierda).
Siempre que cualquier hábito está totalmente normalizado en una sociedad, es muy interesante y revelador investigarle la Historia al asunto ( el nudismo en Alemania, el feminismo en Islandia o el orgullo en España ). Haced la prueba, no falla. Revelaciones máximas. Y ahora, vamos a ver de donde viene esto de ponerse en culos así alegremente.
El nudismo, es una práctica muy común y extendida en Alemania que se remonta a casi principios de siglo.
La primera asociación nudista surge en Berlín en 1910. Como muchas otras, proponía una forma de vida alternativa que hiciera frente a la tecnificación de la época, proponiendo un mayor apego del hombre a la naturaleza.
En 1925 aparece la primera película alemana en fomentar el nudismo, rodada en la UFA: ” Vias hacía la fuerza y la belleza”, de Wilhelm Prager. Años después Leni Riefenstahl tomó el relevo en el prólogo de “Olympia”, ensalzando en este caso la desnudez atlética aria.
Durante los años de ascenso de Hitler al poder el FKK se populariza enormemente: proliferan baños nudistas (Freibäder), aparecen revistas especializadas y en 1929 se celebró un congreso multitudinario que pretendía convertir todas las organizaciones nudistas en un gran movimiento de masas.
Los Nazis, los cuales favorecían un culto tiránico al cuerpo y la belleza, integraron la filosofía nudista en su propia ideología, algo a lo que eran muy dados: desvirtuar ciencias, filosofías e ideologías.
Tanto la provocación a la sociedad moralista burguesa, como su glorificación de un cuerpo humano naturalizado, eran características muy afines al movimiento Nazi.
Hitler proclamó al respecto: “Actualmente todo el mundo acude a baños mixtos sin que eso suscite el menor asomo de malicia. La idea de la desnudez únicamente atormenta a los curas, ya que la educación que han recibido hace de ellos unos pervertidos”.
Durante la división de Alemania se práctico con muchísimo mas entusiasmo en la Alemania comunista, quiero imaginar porque ante la rígida cotidianidad uniformada que cualquier ciudadano de a pie sufría, las horas dedicadas al cuerpo libre, eran realmente libres. Por no decir, y me aventuro a imaginar que siendo comunistas…o desnudos todos o ninguno!
Sin embargo en la parte occidental capitalista, regida por el puritanismo del Comité aliado ( ingleses, franceses y norteamericanos) y la cultura judeocristiana, el nudismo era visto como una práctica inmoral y propia de pervertidos. Y es que esta gente siempre ha estado muy obsesionadita con esto de enseñar teta. Ya para eso de dar «amor excesivo a los niños»…tienen la manga más ancha.
Hoy en día ocho millones de alemanes, están inscritos en los círculos nudistas o eligen el lugar de sus vacaciones preguntándose si podrán bañarse desnudos por completo.
Quizá de las cosas que mas sorprenden es encontrar desnuda, en su mayoría, a la generación de nuestros mayores; sin embargo los jóvenes se muestran mucho más pudorosos en estos tiempos. Es algo que me encanta y me fascina al mismo tiempo, ¡me encantiza!
Las zonas en Berlín, tanto en lagos, parques, como en cualquier sitio, están señalizadas con las siglas FKK.
No seáis ñoñis, cuando se puede ser libre. Así que buscad las zonas FKK, y a dejar volar el cuerpo. 🙂